Acaba el verano… Pero empieza el otoño.
Al compás de las temporadas, sus productos, ingredientes y tradiciones, el restaurante Casa Romántica, su chef, Aridani Alonso, y Víctor Lugo, su propietario e inspirador, recorren los 250.000 metros cuadrados de sus fincas propias en el verde valle de Agaete y sueñan los nuevos menús.
Para estos próximos meses, Casa Romántica propone dos nuevos menús-degustación (‘Tomás Morales’ y ‘Alonso Quesada’), además de un menú vegetariano y una nueva fórmula, una carta -tres primeros, tres segundos, tres postres y una sugerencia del día de mercado en cada uno de los apartados- en la misma línea creativa de vindicación canaria progresiva y sostenibilidad absoluta de los menús-degustación. Con esta nueva propuesta, el cliente podrá diseñar su propio menú al precio fijo de 38 euros.
El gran menú ‘Alonso Quesada’
La joya de la corona, el menú que mejor permite vivir la experiencia ‘Casa Romántica’ en todo su esplendor y color. Con un precio de 70 euros, Aridani nos pasea en él por toda Gran Canaria embarcados en su mirada prospectiva, afilada, sugestiva y muy creativa.
Snacks y aperitivos fríos: túnido curado en cítricos y escabeche de guayaba; e higadillos y tunos indios.
Servicio de pan y mantequillas.
Los preludios: cochafisco y mojo cilantro; muselina de pescado y algas; y conejo en salmorejo.
Los principales: tomates aliñados; pulpo-batata-mojo; arroz meloso de camarón soldado de Agaete con emulsión de sus corales, tomillo limón y yemas curadas en vino tinto de Los Berrazales; steak tartare, velo de papada de cochino canario y puré de pimientos rojos asados; y escaldón de gofio (pescado de temporada asado, gofio y caldo de pescado).
Degustación de quesos de Gran Canaria y vino dulce seleccionado especialmente por Víctor Lugo.
Los postres: mango-hierbas-cítrico; chocolate-algarroba-café de Agaete; y, por fin, los petits fours acompañados de café del valle de Agaete de la propia finca La Laja.
El colorido fresco de Gran Canaria y de las Islas Canarias interpretado en el profundo y calmo verde del Valle de Agaete.
Alejandro de Aldecoa, nuevo jefe de sala
Conocido y reconocido maître de Casa Marcial (Arriondas, Asturias) junto al gran Nacho Manzano (dos estrellas Michelin), Alejandro ‘Álex’ de Aldecoa estuvo también al frente del restaurante Bravo 24 de Carles Abellán (Barcelona, una estrella Michelin), y, ya en Gran Canaria, ejerció de jefe de sala en el Muxgo de Borja Marrero (una estrella verde Michelin) y en los Embarcadero y Ceniza junto al chef Matteo Pierazzoli antes de fascinarse por el proyecto Casa Romántica de Agaete.
Con un bagaje y sensibilidad profesional del máximo nivel, Alejandro está impulsando la sala de Casa Romántica a nuevos niveles de servicio y calidad, configurando, junto al chef Aridani Alonso, el inspirador Víctor Lugo, la directora Jésica Armas y el sumiller Carlos Peña, una de las propuestas de alta gastronomía canaria contemporánea más distintivas y disruptivas del Archipiélago.
Casa Romántica, ejemplo de sostenibilidad
Casa Romántica se suministra de todo lo que producen sus fincas, tres separadas por diferentes producciones. En verano, mangos, aguacates y maracuyá. Además de cebollas, tomates, calabazas, papas, millo, granadas, limones, plátanos… Además, poseen su propia bodega y es el único restaurante que tiene su propio café durante todo el año destacado como atractivo en los menús degustación.
También tienen acuerdos con otros agricultores de la zona que les facilitan lo que tienen en sus fincas, así como un acuerdo con la Cofradía de Pescadores de Agaete para los pescados, siempre seleccionando los primeros en llegar a puerto. Otro acuerdo es con la DO de quesos de Gran Canaria. Por fin, un 50 por ciento de la carta de vinos es canaria.
Casa Romántica tiene exigentes protocolos de gestión de residuos. Con los desechos elaboran compost, y reciclan todo el vidrio y el cartón.
Casa Romántica exige a las empresas de suministro certificados de sostenibilidad y ausencia de plástico.
Su sistema de uso de agua para consumo es a través de agua filtrada por ellos mismos, por lo que no gastan botellas ni plástico.
Todo el mobiliario del restaurante es reciclado, las lámparas que llegaron de hoteles del sur de la isla y del teatro Perez Galdós, auténticas obras de arte creadas por Néstor Álamo.
Toda la vajilla y las pinturas que decoran el espacio están realizadas por artistas de Gran Canaria.
Casa Romántica recoge las aguas de la lluvia para el riego de sus fincas, además tiene una zona de guarda para sus vinos en una cueva para su conservación de forma natural.
Casa Romántica tiene un circuito que pone en valor todos los productos de la isla de Gran Canaria, dando formación específica a su plantilla y a todas las personas que visitan el restaurante y las fincas.
Casa Romántica organiza visitas formativas (mensuales) para su personal a las diferentes empresas que les suministran productos como el aceite, la sal o los brotes.
Casa Romántica, actualmente, está diseñando un plan para la colocación de placas solares y puestos de carga para coches eléctricos.
La filosofía de casa romántica es la defensa del producto canario a través de un proyecto sostenible contribuyendo lo máximo posible a rebajar la huella de carbono.