Como todas las celebraciones, la festividad de Todos los Santos tiene también su propia gastronomía, y no sólo en nuestra isla sino en todo el mundo. Ahora la influencia americana nos está imponiendo cada vez más el “Halloween” con sus dulces, galletas y pasteles en torno a la calabaza, que pueden hacer desaparecer parte de los platos o comidas propias de esta fiesta en Menorca.
Hoy en día la gastronomía de Todos los Santos está prácticamente limitada a los buñuelos y panellets, pero como veremos en Menorca había mucha más riqueza gastronómica para celebrar ese día.
El refranero popular dice “Por Todos los Santos murtones y bellotas, rebozuelos y rovellones” o “Por Todos los Santos madroños y bellotas, lentrisca madura y rovellones”, por lo tanto nos indica que es hora de ir a recoger estos frutos silvestres, de los que hoy prácticamente sólo vamos a buscar los rovellones y rebozuelos además de las setas de cardo y, todavía un poco los madroñas. De mirtillos ya casi no se encuentran y las bellotas los podemos ver en el suelo, en los encinares, sin casi más provecho que alimento para los cerdos, como también se ha perdido la costumbre de ir a coger madroños y las granadas tampoco tienen la importancia que tenían en tiempos pasados.