La pizza light es posible

Más de uno ha deseado que fuera un plato light. ¿Pero esto es posible? Sí, es posible hacer pizzas más ligeras.

La pizza light es posible

Las pizzas pueden ser ligeras si se cuidan los ingredientes y cantidades. Las que vienen preparadas o se compran en cadenas de alimentación son muy tentadoras… y casi siempre hipercalóricas, con ingredientes que no ayudan a llevar una dieta saludable. Por eso más de uno ha deseado que fuera un plato light. ¿Pero esto es posible? Sí, es posible hacer pizzas más ligeras.

Cómo aliviar la pizza desde la base hasta los ingredientes:

La pizza, en su origen, podría contemplarse como una receta típica mediterránea saludable. La base, que es una masa harinosa, es como la del pan (harina, agua, levadura y sal), con la única diferencia de que a la masa se le añade un poco de aceite para que resulte más jugosa o crujiente. En las pizzas industriales, en cambio, la base contiene a menudo más ingredientes (grasas, azúcares) que suman calorías e, incluso, hay rellenas de queso en los bordes. La composición, en este caso, se aleja bastante del original. Además, en cuestión de calorías, el asunto cambia porque la ligera base original de la pizza no se toma sola, sino acompañada de multitud de condimentos e ingredientes, que condicionan el valor nutricional del plato.

Por eso, para aliviar una pizza, lo importante es revisar los alimentos que la componen y las cantidades que se añaden de cada uno, al menos, de los más problemáticos. Para preparar una buena base de pizza, se recomienda hacer la masa en casa utilizando harina, agua, levadura, sal y un poco de aceite de oliva. Si se compra la masa, es necesario escoger una opción con pocos ingredientes adicionales y aditivos, y preferir una masa fina para conseguir una textura similar a las pizzas italianas. La masa puede congelarse si no se utiliza toda, y escoger harina integral puede hacerla más saludable.

En relación con el queso, es importante no abusar, ya que puede incrementar significativamente el contenido de grasas y calorías de la pizza. Opta por quesos de calidad y utilízalos en cantidad moderada para evitar que el sabor de los otros ingredientes se pierda. En cuanto a los embutidos, es mejor evitar su uso si se busca una pizza más ligera, sustituyéndolos por opciones de carne magra o jamón ibérico sin grasa.