Bep Al·lès/Ciutadella - En Menorca, la producción de naranjas es muy escasa por la tramontana por un lado, y por el abandono de los huertos sufridos desde hace décadas cuando el campesinado dejó sus trabajos propios de siembra de trigo y cereales, además de horticultura, para convertirse en ganadero para la producción de leche y queso, pero quienes las están recuperando ven cómo el consumidor apuesta de cada vez más por el producto de Menorca y también por su sabor, ya que no es lo mismo una fruta recién tomada del árbol donde ha madurado, que aquellas que nos llegan en cámaras frigoríficas, donde maduran, y muchas veces de países como Sudáfrica.
También el cambio en el modelo productivo de los años 50 con prioridad en la leche, implicó que el huerto y frutales pasaran a ser productos de cultivo de ocio de los propios campesinos o de aquellos particulares que tenían un huerto dedicando la producción al consumo propio.
En Menorca, los frutales se sembraban en los barrancos, para proteger los árboles de los vientos de tramontana, y es donde todavía se conservan variedades de cítricos como es el caso del naranjo dulce que según el gran amigo y botánico Pere Fraga, este árbol ( Citrus sinensis) como la mayoría de otros cítricos que se cultivan por su fruta es un pequeño árbol de hoja perenne que de forma natural ramifica siguiendo un patrón regular y ordenado, esto hace que a su vez este árbol de fruta, a veces también sea ??valorado como planta ornamental. Como ocurre con otros cítricos cultivados su origen es incierto. No es una especie natural. Hay un cierto consenso en considerarlo de origen híbrido, pero no existe tanto acuerdo sobre cuáles son sus progenitores. La versión más aceptada sería el resultado de un cruce entre el pomelo grueso (Citrus maxima) y el mandarino (Citrus reticulata). Como otros cítricos cultivados su origen geográfico se situaría hacia el sudeste asiático. Su llegada a Occidente fue relativamente tardía. Las primeras referencias precisas de su cultivo en Europa son del primer cuarto del siglo XVI en el sur de Italia. Con toda probabilidad, fueron los portugueses quienes introdujeron las primeras plantas procedentes de la India después de la circunnavegación de África.
Nuestra isla tiene también una toponimia que hace referencia al cultivo de naranjas, llamadas antiguamente pomelos, y es por eso que tenemos lugares con el nombre de S'Aranjassa, que significa lugar donde se siembran naranjas (aranges), S'Arangí, pequeño sitio de producción de cítricos, etc.
En la cocina no tenemos casi platos donde la naranja sea la protagonista, a no ser las confituras y mermeladas de naranja dulce y también de naranja amarga, además de los usos de la piel de la naranja en la repostería, como aromatizante de pasteles, tortas dulces, aunque en los recetarios de cocina señorial sí, que hemos encontrado recetas de flanes de naranja, de fruta confitada de naranja y también de licores de maceración elaborados con pieles de naranja, o el postre de naranja con miel y canela.