A la hora de hacer las matanzas del cerdo en Menorca, se miraba mucho que las mujeres no tuvieran la regla, porque según decían todo lo que tocaban lo estropeaban, sobre todo las cosas que quedaban crudas: sobrasadas, salchichones… Con este tema, en el campesinado era bastante rígido.
Las mujeres en ese estado lunar, cuando tenían la menstruación, tampoco podían sembrar habas ni determinadas flores, porque mal crecían o se morían.
También se dice que una mujer que tiene luna, la regla, tampoco podrá emulsionar una salsa mahonesa, ni con el túrmix y menos con el mortero, y que ésta por la temperatura del cuerpo se cortarà y nunca llegará a emulsionar.